El Pacífico colombiano es brisa marina, paisajes de ensueño y un distrito llamado Buenaventura que siempre será el bello puerto de mar, o sin duda la perla negra del turismo de naturaleza en Colombia.
Desde el muelle de Buenaventura y a bordo de una de las lanchas de ‘Destino Pacífico’ usted recorre el gran estero de la bahía de Buenaventura, donde los manglares, acantilados y zonas de alta biodiversidad son la constante, en un mar no tan pacífico, porque el oleaje lo convierte en toda una aventura; y también se puede apreciar la expresión de las desigualdades que en este país se volvieron cotidianas representadas en comunidades de palafitos que son la resistencia del pueblo afro de Colombia. Llegar al muelle de Juanchaco es entender que la conjugación del trópico y lo exótico, te está atrapando, pues desde pinceladas de cultura y naturaleza te recibe este Pacífico endémico y único.
Aquí en Juanchaco está la esencia del trópico que, desde su humedad, calor, odisea, multicolor, sabores para paladares exóticos, cultura y diversidad te enseñan que no solo es un destino de sol y playa, sino un destino de naturaleza exótica y única en la Colombia olvidada como en esas historias de realismo mágico. Mientras caminas desde Juanchaco hacia Ladrilleros y justo muy cerca de la maestra, Marina Gamboa, y su ‘Museo de bebidas ancestrales’, se encuentra una historia de vida que hay que contar, porque es el resultado del esfuerzo, constancia y que con sello de mujer Pacífico se convierte en una escena de liderazgo que hay que contar y que hoy cautiva a quienes visitan este paraíso escondido de Colombia.
Aquí se hace realidad el sueño de Nancy y su hija Mónica, quienes bajo el liderazgo de Nancy, iniciaron un proyecto de alojamiento en el 2005 para aquellos desprevenidos que hace más de una década empezaron a venir a este pedacito de cortesía, amabilidad, buen trato y el mejor servicio que te puedas imaginar; porque Nancy es la anfitriona perfecta, ella es una sola sonrisa, así te recibe, así te atiende y así de a poco te hace sentir como en casa y, ¿adivina cómo te despide?, con una sonrisa de amistad que te llega al corazón de viajero, que sabe que aquí en este pedacito de Pacífico tienes una amiga y un lugar para siempre llegar.
Con todo este potencial de diversidad natural y cultural, con tanto por mostrar y con esta casa llena de calor y la mejor atención, un día decidido que se llamaría ‘Alojamiento Coral Resort’, y quién iba a pensar que hoy es un referente de atención, alojamiento y experiencias del Pacífico vallecaucano.
Los viajeros llegan, las experiencias pasan, y el visitante del ‘Coral Resort’ se siente a gusto, y definitivamente pasa la voz y más visitantes quieren venir a Juanchaco y Ladrilleros a conocer este lugar de encanto colombiano.
Ahora el reto para este emprendimiento local es lograr ser más visible y más conocido, y es aquí en este momento de la historia cuando entra en escena Mónica la hija Nancy, quien gracias al esfuerzo de su familia logro salir, crecer y convertirse en comunicadora social y ahora community manager del Alojamiento, con su sonrisa de soñadora que heredó de su madre, su esencia y orgullo de mujer Pacífico; hoy muy clara, empoderada y entendiendo que después de salir y crecer es necesario y oportuno volver para construir desde adentro, desde la tierra y desde el corazón que tiene el nombre de su Juanchaco y Ladrilleros del alma.
Mónica respira y se apasiona por el Pacífico, y un día de pandemia mientras pensaba como hacer que su ‘Coral Resort’ siguiera vigente y en vista de todos, y mientras extrañaba su Juanchaco y Ladrilleros del alma, decidido crear a ‘Miss Juanchaco’, una influenciadora de viajes que se dedica a promocionar las playas, manglares, esteros, cultura de Juanchaco y Ladrilleros. El éxito fue tal, que muchos empezaron a seguir ese proyecto y a viajar para conocer este destino maravilloso que ‘Miss Juanchaco’ recomendaba cada día con sus historias de ensueño.
Pero como la pasión por ayudar y por construir terruño es más grande, seguir acompañando a su comunidad es su meta, y por eso en un día de esos tropicales del Pacífico vallecaucano, Mónica se encontró con su amigo de la Fundación Huaitoto y decidieron conformar los ‘Juanchamigos’, una iniciativa para estar presentes en el corazón de aquellos que en su comunidad necesitan un abrazo de energía Pacífico, y se dedicaron a hacer campañas para celebrar la navidad a los niños y ahora trabajan en hacer campañas para limpiar sus playas de plásticos contaminantes. Con esa idea ya conformaron la ‘Juanchatienda’, y así la historia continua llena de esfuerzo, de corazón, y de esencia Pacífico. Al fin de cuentas si crees que esta causa puede ser tu causa también, te están esperando en Juanchaco y Ladrilleros para ayudar a seguir construyendo un territorio de paz.
¡Conviértete en un ‘Juanchamigo’!
Por: Germán Morales, docente y director de la Escuela de Turismo UAO.
Fotografías: cortesía de ‘Coral Resort’.
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